Esta pieza corresponde a un rali que, en palabras de Augusta, constituye un “plato de palo con dos agarraderas, en que toman la comida” (1916, p. 194). Inez Hilger (1957) también asevera la presencia de dos asas en los rali, sin embargo, no ocurre así en las descripciones de Joseph que señala que se trata de “escudillas de madera de forma hemisférica” (1931, p. 238). Las variaciones se pueden hallar, además, en la presencia de patas cónicas en la base. Los rali se realizan cortando troncos en secciones transversales (Hilger, 1957) que, posteriormente, se labran con maichiwe y coipu (Joseph, 1931).
Los rali se destinan para comer mote, harina tostada u otros alimentos (Joseph, 1931, p. 238). A estos usos se suman los señalados por Inez Hilger (1957), que registró que se utilizaban para lavar carne y verduras, mezclar comida, remojar ropa, transportar hilo caliente recién teñido, trillar el grano a pie y almacenar.