Obra de formato rectangular en orientación horizontal. Fotografía en blanco y negro que captura un paisaje natural. En primer plano, con línea de horizonte abatida, se observan leños cortados y pasto. Arriba, en el plano de cielo, nubes tempestuosas.
Estado de conservación:
Bueno
Iconografía:
Trabajo fotográfico realizado en 1991 y 1995 que buscaba recuperar los últimos vestigios; humanos y territoriales, del pueblo kawesqar, con el objetivo personal de negar la ausencia y el abandono, la fragmentación y fragilidad, estos mismos serán elementos espirituales constantes en esta búsqueda de la artista quien señala; "La exigencia solo viene de mi atracción por el confín del mundo en el que se conjugan el fin del espacio y el fin del tiempo". Ese espacio liberado, separado y negado será protagonista de un mundo de relaciones sociales que la cámara busca capturar. Personas, vivencias y memorias, particularmente surgen las relaciones, los lazos y apegos de las familias alacalufes Tonko, Molinari, Renchi, Achacaz, Paterito, entre otras.