Historia de propiedad y uso:
La obra fue vendida por Ana Cortés a don Oscar Guzmán Ponce, un importante coleccionista chileno, luego de su muerte estuvo en manos de su viuda, la señora Bernardita Mandiola, quien finalmente se la vendió a Patricio Lynch.
Referencias documentales:
Museo Nacional de Bellas Artes: Ana Cortés Reb/velada pp. 25 , Andros Impresores, Santiago, 2015
