Santiago Apóstol en las Navas de Tolosa

Paisaje con un guerrero a caballo, ocupando gran parte de la composición, arrollando a un personaje masculino que cae. El guerrero (Santiago) lleva un yelmo y levanta la espada con la mano derecha. Viste túnica –sobre la cual está la concha característica- y manto con decoración floral; bajo éste se asoma su pie derecho descalzo, en el estribo. Tras el caballo, hacia el fondo, se despliega el manto rosado –color que lo representa iconográficamente-. Al fondo se abre un paisaje pintado, con otros guerreros en los distintos planos.

La figura del Apóstol presenta una disminución de las proporciones corporales que vendrá a ser en el siglo XVIII una característica de la cultura virreinal; su caballo parece directamente inspirado en algún caballo flamenco y resulta grotesco por la falta de naturalidad.La figura caída, angulosa y dura, podría ser posterior o de otra mano.

El apóstol Santiago se ganó la condición de patrón de España en 844, tras la victoria contra los musulmanes en la Batalla de Clavijo (844); a partir de entonces se le denomina Santiago Matamoros en este tipo de representaciones iconográficas.
Algunos ejemplos en http://labitacoradejenri.blogspot.com/p/fotos-de-santiago-matamoros.html
A partir del siglo XVI, Santiago Apóstol se fue transformando en uno de los santos más venerados de América Latina. Al convertirse en Mataindios, Santiago se vuelve transmisor del mensaje de una Iglesia que acoge al convertido y castiga a los infieles.